El bache eterno

En la intercepción de las calles Maceo y Rubiera existe, creemos que desde antes que se fundará Regla, un gran bache, es eterno, al menos un par de veces al año es reparado por la empresa de viales y una y otra vez vuelve a salir. ¿Cuál es el misterio? ¿El duende del bache?

Cuando usted se aproxima a la esquina ya debe ir pensando por donde sorteará el fanguero y deberá estar atento a no coincidir con el paso de un auto o guagua, pues puede terminar empapado de agua sucia de la salpicadura de los neumáticos.

La solución es simple, pero no crea por eso que fácil, lo primero que hay que hacer es eliminar el salidero que existe en la calle Rubiera (a la derecha subiendo desde Maceo a mediación de cuadra); no es un gran salidero, es algo así como una llave abierta, solo se bota el agua en el horario que el acueducto pone el agua, no impide que todos los vecinos de la zona alta cojan agua por lo que, a nadie, incluido el acueducto, le importa, pero esta se empoza en la esquina de Maceo.

El agua empozada socaba el pavimento de la calle y el paso de los autos y guaguas hace el resto.

Por tanto, lo primero, primero, primerísimo: es eliminar el salidero del acueducto; luego viene otra parte: el coger el bache, que no es solo echar el hormigón asfáltico y apisonarlo un poco, como hace el camión de reparaciones de viales comúnmente.

La brigada de viales debe iniciar el trabajo configurando (con martillo neumático) los bordes del bache, cortando el asfalto en vertical hasta una profundidad de al menos una pulgada (mejor un poquito más) creando una cajuela, en la calle, que contendrá el nuevo hormigón asfáltico. Esto se hace para que cuando se coloque el asfalto este tenga el suficiente espesor en los bordes para soportar el paso de los vehículos sin partirse, pero antes de colocar el asfalto habrá que haber limpiado (barrido) el hueco ya configurado y luego rociarlo con asfalto líquido buscando que exista adherencia ente el hormigón viejo y el nuevo que será añadido. Por último, luego de vertido el hormigón asfáltico: la suficiente compactación, no un par de pasadas del compactador y… recoge y vamos.

Infinidad de veces notará usted que la brigada de viales lo único que hace es crear un nuevo obstáculo en la vía, lo que esta vez en sentido inverso, sobresaliendo de la calle.

Trabajabamos con un técnico extranjero que siempre nos decía “Ingeniero, hacerlo mal o bien cuesta lo mismo, hagámoslo bien desde el inicio.”